Una reflexión sobre tendencias

(publicado originalmente en http://www.lacoctelera.com/zorrocloco el 20/05/2005)

Hablando con los alumnos que asisten al curso de orientación a objetos que se imparte en un prestigioso centro, me entero que uno de los objetivos que se persigue utilizando esta tecnología es permitir una velocidad de desarrollo que evite la usual incidencia de contemplar al terminar un diseño conceptual que los requerimientos iniciales ya han cambiado.

(¡Vaya, Somormujo, esto lo has oido antes en otros sitios!).

Parece ser que en estos días que corren, el tiempo vuela (nunca mejor dicho) y las necesidades del negocio cambian en cuestión de dias, cuando no de horas (y si nos extraña, fijémonos en como cambia la oferta en Telecomunicaciones).

De resulta de esta conversación, vino a mi mente el recuerdo de otra lectura realizada no ha mucho, pero que también me había transmitido esa necesidad de gestionar cambios con mucha rapidez.

La lectura en cuestión no tiene a priori mucho que ver con la empresa. Es realmente un análisis militar (¡Claro, Somormujo, ¡como no!, tu y tus cosas), y está disponible en la red, y esta vez, en Castellano. Como ocupa solo siete páginas, yo os animaría a leerlo.

http://www.realinstitutoelcano.org

Estudios e investigacionesà Europa “Lecciones aprendidas: la guerra de Irak desde la perspectiva francesa” (José Izquierdo, 27/02/2004)

Quitando la parte militar del asunto, lo que traciende del análisis son las lecciones aprendidas por los franceses, que pueden resumirse (según mi humilde opinión) en las siguientes:

Capitalización de experiencias: Este fenómeno, que ya ha trascendido al mundo civil, en lo que llamamos Knowledge Management, se impone en los ejércitos del mundo a través de los centros de “lecciones aprendidas”, estableciendose las mismas por los expertos en la materia después de un juicio crítico (AAR After Action Review). Los europeos al parecer preferimos llamarlo “Análisis Constructivo”.

Amplia utilización de inteligencia de libre uso (OSINT, Open Source Intelligence), como fuente de obtención de datos. En los últimos años observamos una tendencia en los ejércitos a utilizar más los datos que pueden aparecer en la red o en revistas especializadas. En el caso de las empresas, los gurús de turno aconsejan que las empresas tengan departmentos dedicados a la gestión de la inteligencia y que esta sea un órgano de soporte de la dirección para la toma de decisiones. Aquí vemos otra función extrapolada a la vida civil, e incluso con el apoyo de la Comisión Europea . Sobre la utilización de funciones de inteligencia por parte de la empresa, recomiendo la lectura de “Inteligencia Económica y Tecnológica. Guía para principiantes y profesionales”, disponible en:

http://www.madridmasd.org/informacion/doc/15_InteligenciaEconomicaTecnologica.pdf

Planificación Conjunta. El concepto de “joint” ha calado en todo el ejército americano, y todo aconseja copiar de ellos. El análisis recalca que se realizó una planificación conjunta central y otra en las diversas áreas, manteniendo entre ellas una “relación fluida” durante TODAS las fases del proceso (las mayúsculas y el entrecomillado son mías). Lo mas curioso es el colofón que señala el analista: el no estar adiestrados en el trabajo conjunto “obligó a los norteamericanos y a los británicos a eludir la creación de unidades multinacionales y a operar en zonas de acción diferenciadas”. (Sume el lector dos y dos).

Amplio uso de sistemas C2 (Command and Control).- La utilización de tecnología punta (la buena utilización, derivada del buen conocimiento de su utilización) ha permitido realizar una campaña en la que ha primado la CONDUCCIÓN de las operaciones sobre la planificación de las mismas (recordemos que ningún plan sobrevive a su primer contacto con la realidad). Los combatientes se han adaptado sobre la marcha a sus nuevas funciones al tener sistemas que soportaban la información y el conocimiento (es el “campo de batalla digitalizado”, con amplio uso de tecnología y que les permite un tempo de operación menor que el de sus competidores).

Quiero imaginar que en un futuro próximo estas tendencias se impondrán en el mundo empresarial, donde cada vez se dará más importancia al incremento del tempo de las operaciones (apertura de centros, sistemas de distribución, lanzamiento de productos), y a la capacidad de respuesta de la empresa frente a sus competidores (capacidad que se basará, sin duda, en los sistemas de inteligencia de la empresa, en su capacidad de modificar sus sistemas en tiempos record y en la flexibilidad de sus trabajadores para adaptarse al cambio).

Llegado a este punto, mi paciente lector, te invito a que reflexiones sobre estos pequeños puntos y algún día, en el comedor, en lugar de hablar sobre Crónicas Marcianas, le damos una pequeña vuelta al tema.

Saludos, y me piro a una reunión con algún departamento de esos con los que no colaboramos lo suficiente.