4.4.06

Me he tratado de morder la lengua, pero...

Te he escuchado, ministro, sin decir ni mú, durante todos estos meses que ha durado “el parto de la burra” del estatuto de Cataluña.
He escuchado a muchas personas decir que eras la parte racional del Gobierno y que te apoyaban todos los “barones”.
He oído y leído avisos de todos los colores que decían que todo era palabrería, pero como muchos, he pensado que, al final, se impondría la cordura y la lógica…¡pues no!, que al final tu y los tuyos os habéis ciscado en todos, como de costumbre.
Ahora, queda esperar que el Tribunal Constitucional se pronuncie y ponga las cosas en su sitio…y que alguien le obedezca, que ejemplos tenemos como aquella pasada que por la bisectriz del ángulo correspondiente hicieron en el norte con cierta sentencia del Supremo.

…y de ti, pues lo de siempre, que es mala pata la suerte que tienen las Fuerzas Armadas con sus ministros. ¡La leche!, no me perderé tus explicaciones. Estoy deseando ver como se lo explicas a los militares mientras estos, en posición de firmes, aguantarán, como siempre, la sarta de tonterías. ¡Seguro que es mejor que un diálogo de Buenafuente!.
¿Lo de dimitir es desertar?